Con el fin de entender de forma más clara lo que la Fundación Holcim busca cuando premia algún proyecto en los Holcim Awards, se realizó un análisis de 3 referentes ganadores de estos premios en diferentes partes del mundo, identificando aquellos aspectos más llamativos e innovadores.
Fábrica de Música - Sao Paulo, Brasil:
Global Submission 2012 - Urban remediation and civic infrastructure hub, São Paulo, Brazil |
Este proyecto desarrollado por Urban-Think Tank en la favela de Paraisópolis es un buen ejemplo de sustentabilidad y de diseño bioclimático gracias al equilibrio generado entre elementos de control climático pasivos y activos que generan condiciones de confort al interior, al mismo tiempo que permiten un uso responsable y ético de los recursos.
Debido a que el clima en Sao Paulo es principalmente caluroso y húmedo, el mayor reto de los arquitectos de este proyecto consistía en refrigerar este equipamiento de 5 plantas sin implementar sistemas artificiales de alto consumo energético como aires acondicionados, por lo que decidieron controlar la luz solar, para reducir la ganancia energética durante el día, y aprovechar las corrientes de aire para ventilar los espacios interiores. Para poder lograr esto, implementaron bloques de concreto de forma estratégica que combinados con el sistema de chimenea solar ubicado en el costado oeste logran generar una ventilación adecuada gracias a la libre circulación del aire y al efecto chimenea que saca el aire caliente del edificio, ahorrando energía.
Paralelamente, incorporaron losas activas (losas de concreto que cuentan con un entramado de tuberías en su interior, por las cuales fluye agua, absorbiendo el calor), las cuales al absorber el calor del techo reducen la sensación de calor al interior de los espacios. Durante la noche, el agua de las losas es enfriada en la terraza con ayuda de los colectores híbridos, mientras que durante el días, los paneles solares de estos colectores generan incluso más electricidad de la que el edificio necesita, sin embargo esta energía extra no se pierde, ya que los arquitectos contemplaron la posibilidad de que esta sea utilizada por los edificios aledaños. Finalmente, el proyecto cuenta con terrazas para agricultura urbana, un sistema de reutilización de aguas lluvias y manejo de aguas grises.
Al investigar en documentos disponibles sobre este proyecto en la página oficial del concurso, se pudo ver que el jurado decidió premiarlo debido a su sustentabilidad tanto a pequeña como a gran escala, sin embargo se hace evidente que el tema social jugó un papel importante en la decisión, ya que este equipamiento logra abordar el problema de carencia de infraestructura cultural de una forma responsable con el medio ambiente, logrando que la sustentabilidad del proyecto no quede relegada a un tema netamente ecológico y económico, sino que se expanda al ámbito social. Adicionalmente, como parte del concepto de sustentabilidad social, el proyecto busca generar oportunidades de trabajo en construcción en el sector gracias al uso de materiales y sistemas de la zonas, al mismo tiempo que genera cohesión social.
Debido a que el clima en Sao Paulo es principalmente caluroso y húmedo, el mayor reto de los arquitectos de este proyecto consistía en refrigerar este equipamiento de 5 plantas sin implementar sistemas artificiales de alto consumo energético como aires acondicionados, por lo que decidieron controlar la luz solar, para reducir la ganancia energética durante el día, y aprovechar las corrientes de aire para ventilar los espacios interiores. Para poder lograr esto, implementaron bloques de concreto de forma estratégica que combinados con el sistema de chimenea solar ubicado en el costado oeste logran generar una ventilación adecuada gracias a la libre circulación del aire y al efecto chimenea que saca el aire caliente del edificio, ahorrando energía.
Paralelamente, incorporaron losas activas (losas de concreto que cuentan con un entramado de tuberías en su interior, por las cuales fluye agua, absorbiendo el calor), las cuales al absorber el calor del techo reducen la sensación de calor al interior de los espacios. Durante la noche, el agua de las losas es enfriada en la terraza con ayuda de los colectores híbridos, mientras que durante el días, los paneles solares de estos colectores generan incluso más electricidad de la que el edificio necesita, sin embargo esta energía extra no se pierde, ya que los arquitectos contemplaron la posibilidad de que esta sea utilizada por los edificios aledaños. Finalmente, el proyecto cuenta con terrazas para agricultura urbana, un sistema de reutilización de aguas lluvias y manejo de aguas grises.
Al investigar en documentos disponibles sobre este proyecto en la página oficial del concurso, se pudo ver que el jurado decidió premiarlo debido a su sustentabilidad tanto a pequeña como a gran escala, sin embargo se hace evidente que el tema social jugó un papel importante en la decisión, ya que este equipamiento logra abordar el problema de carencia de infraestructura cultural de una forma responsable con el medio ambiente, logrando que la sustentabilidad del proyecto no quede relegada a un tema netamente ecológico y económico, sino que se expanda al ámbito social. Adicionalmente, como parte del concepto de sustentabilidad social, el proyecto busca generar oportunidades de trabajo en construcción en el sector gracias al uso de materiales y sistemas de la zonas, al mismo tiempo que genera cohesión social.
Plan Maestro de Regeneración Urbana - Ciudad Juárez, México:
Bronze 2012 - Urban regeneration master plan, Ciudad Juárez, Mexico. |
Este proyecto desarrollado por Arquitectura 911 sc en Ciudad de Juárez es un buen ejemplo de cómo a partir de una problemática social fuerte y unas edificaciones y espacio público preexistentes se puede generar un proyecto de renovación que al trabajar en áreas comunes logra generar un impacto positivo en el sector.
A pesar de que Ciudad Juárez cuenta con una localización estratégica para el comercio textil con Estados Unidos, la carencia de infraestructura urbana apropiada y actividad económica en la periferia de la ciudad ha generado comunidades de bajos ingresos que se encuentran aisladas y se convierten en incubadoras de problemáticas sociales de fuerte impacto como la violencia intrafamiliar y el crimen organizado. Como respuesta a esto, los arquitectos plantean regenerar el sector nor-oeste (por ser una de las zonas más afectadas de la ciudad) a partir de las problemáticas principales e ideales recolectados de la comunidad por medio de talleres participativos.
Con el fin no sólo de reducir los costos del proyecto, sino también de generar apropiación del proyecto por parte de la comunidad, se utilizaron sistemas basados en los sistemas constructivos básicos, lo cual a su vez genera un proceso educativo participativo en el que los conocimientos adquiridos se transmiten a otras personas. De igual forma, al involucrar las necesidades de la comunidad, se logró generar estrategias financieras que permitieran mejorar la economía del sector por medio de locales comerciales que permiten generar ingresos a los habitantes del sector, al mismo tiempo que genera recursos para el mantenimiento del proyecto.
El espacio disponible para el desarrollo de este proyecto consistía en una serie de espacios residuales de viejas cuencas de retención, en los cuales el mejoramiento del espacio por medio de andenes, calles pavimentadas y la incorporación de vegetación por medio de un diseño paisajístico apropiado logran mejorar el barrio, no sólo de forma física sino también social. Al desarrollar esta propuesta en el sector, se reduciría el riesgo de inundación existente en el sector al captar el agua lluvia, permitiendo su reutilización, mientras que el aumento en la vegetación ayuda a mitigar las olas de calor y tormentas de arena que se generan. De igual forma las terrazas para agricultura urbana, los talleres, lotes comerciales, parques y unidades de vivienda progresiva que se plantean a lo largo del proyecto, activan y cohesionan a la comunidad, mitigando las problemáticas sociales existentes al proporcionar espacios aptos para el desarrollo cultural, físico y económico del sector.
Al investigar en los archivos del concurso se pudo ver que sin duda alguna el aspecto social de este proyecto jugó un papel importante en la decisión del jurado, ya que estos quedaron impresionados por la aproximación que equipo de diseño tuvo hacia la comunidad por medio de los talleres. Sin embargo, también queda claro que el aspecto estético del proyecto también jugó un papel importante, ya que validaba la intervención en ese sector y permitía reunir a la comunidad para que esta pudiera lograr un mejor desarrollo.
Este proyecto desarrollado por Anderson Anderson Architecture en Honolulu es un buen ejemplo de diseño bioclimático y de transferibilidad del proyecto, ya que su diseño modular fácilmente transportable permite movilizar el proyecto con relativa facilidad y generar un crecimiento progresivo.
Este salón de clases esta diseñado no sólo para generar las condiciones interiores necesarias para el aprendizaje, sino también para tener independencia energética y utilizar favorablemente las condiciones de iluminación ventilación disponibles en el sector por medio de un diseño que aprovecha las determinantes del lugar. Para lograr esto, los arquitectos combinaron sistemas de paneles fotovoltaicos para la producción de energía solar con un sistema de turbina para la producción de energía eólica y sistema de recolección de aguas lluvias. De igual forma, para poder lograr las condiciones de confort climático al interior del proyecto, se aprovecha la ventilación natural y se controla la luz natural que ingresa a los espacios por la parte superior, aspectos que ayudan a generar un menor consumo de energía.
Al investigar más a fondo en artículos de la página del concurso se puede ver que uno de los aspectos que influenciaron la decisión del jurado fue la capacidad educativa que tenía el proyecto, ya que este no sólo funciona con energías limpias, sino que permite enseñarles a los niños sobre estas energías al estar en contacto visual directo con ellas. De igual forma, se puede ver que la transferibilidad del proyecto dada por los módulos que implementa y la facilidad de transporte de los mismos supone un alto potencial de mejoramiento social al permitir transportar este tipo de salones a lugares remotos.
Salón de Clases Portátil - Honolulu, Estados Unidos:
Acknowledgement prize 2012 - Energy neutral portable classroom Honolulu, HI, USA. |
Este salón de clases esta diseñado no sólo para generar las condiciones interiores necesarias para el aprendizaje, sino también para tener independencia energética y utilizar favorablemente las condiciones de iluminación ventilación disponibles en el sector por medio de un diseño que aprovecha las determinantes del lugar. Para lograr esto, los arquitectos combinaron sistemas de paneles fotovoltaicos para la producción de energía solar con un sistema de turbina para la producción de energía eólica y sistema de recolección de aguas lluvias. De igual forma, para poder lograr las condiciones de confort climático al interior del proyecto, se aprovecha la ventilación natural y se controla la luz natural que ingresa a los espacios por la parte superior, aspectos que ayudan a generar un menor consumo de energía.
Al investigar más a fondo en artículos de la página del concurso se puede ver que uno de los aspectos que influenciaron la decisión del jurado fue la capacidad educativa que tenía el proyecto, ya que este no sólo funciona con energías limpias, sino que permite enseñarles a los niños sobre estas energías al estar en contacto visual directo con ellas. De igual forma, se puede ver que la transferibilidad del proyecto dada por los módulos que implementa y la facilidad de transporte de los mismos supone un alto potencial de mejoramiento social al permitir transportar este tipo de salones a lugares remotos.
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